Ampliar cobertura en educación superior exige una
política de empleo: Anuies
Ariane Díaz
Los retos en educación superior en materia de cobertura,
demanda y formación requieren como condiciones indispensables respaldo
financiero y políticas acertadas de empleo, pues tan importante es que los
alumnos que lleguen a nivel superior se mantengan como que al egresar
encuentren oportunidades laborales.
En la presentación de Inclusión con responsabilidad social,
elaborado por la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de
Educación Superior (Anuies), Roberto Rodríguez, investigador de la Universidad
Nacional Autónoma de México, señaló que entre las propuestas de la agrupación
está alcanzar la cobertura de 50 por ciento al fin del sexenio, lo cual exige
la expansión del sistema en materia de cobertura.
Cumplir con ese propósito significa pasar de 3 millones a
crear 4.5 millones de nuevos lugares y requiere un sistema de becas más
ambicioso en el que todos los jóvenes que accedan a educación superior y que
provengan de familias catalogadas entre los cuatro primeros deciles de ingreso
estén becados para soportar la estancia universitaria pues se trata de que
puedan permanecer y conseguir egresar.
Ello supone un respaldo financiero sin precedentes de los
gobiernos federal y estatales, y que la obligatoriedad del nivel medio superior
se cumpla para que haya la demanda suficiente.
La primera versión del documento (trabajado desde hace más
de dos años por especialistas) fue presentada a los ex candidatos
presidenciales el año pasado y ya se entregó al presidente Enrique Peña Nieto,
así como a autoridades educativas, y a otros actores relacionados.
En su momento, los rectores de 175 instituciones de educación
superior que conforman la Anuies presentaron el texto como una propuesta para
iniciar una nueva etapa en el manejo de la educación superior, conformada por
10 ejes estratégicos de los que se desprenden 37 acciones prioritarias.
Por su parte, el ex secretario de la Anuies Carlos Payán
Figueroa expuso que en los pasados 10 años egresaron 4 millones de jóvenes y
hubo poco más de 1.5 millones de empleos formales, lo que da cuenta del reto en
materia laboral.
Advirtió que en la presente década, según datos de la
Secretaría de Educación Pública, cada año egresarán 545 mil jóvenes de
licenciatura (contra 370 mil de la década anterior), lo que requiere un nuevo
modelo de desarrollo económico, una mejor distribución de ingreso y disminuir
las brechas de desigualdad.
Publicado en La
Jornada